Cuando pensamos en una camisa, tendemos a imaginar un hombre impecablemente vestido. Un hombre trajeado, con esa perfecta camisa blanca. Eso es una camisa. Sin embargo, cuando compramos una camisa, prestamos atención principalmente a aspectos como la talla o el color/estampado, dejando al azar todo lo que a ese ‘hombre impecablemente vestido’ le hacia tan perfecto en nuestra imaginación: los pequeños detalles. La camisa es una de las prendas más personalizables y con mayor cantidad de particularidades. Una de las más importantes (y de las más ignoradas) es el tipo de cuello.
Existe un tipo de cuello para cada persona y ocasión y, teniendo en cuenta la cercanía a nuestro rostro, no deberíamos restarle importancia. El cuello, además de ser capaz de dar un aire más elegante o más informal a nuestro look, también es capaz de arruinarlo por completo si no acertamos con la elección. Para que esto no ocurra, vamos a repasar los principales tipos de cuello de camisa y sus particularidades.
CUELLO ITALIANO
Comenzamos por este ya que es de los más populares y fáciles de llevar. Se caracteriza por ser estrecho y sus palas no son ni muy anchas ni tienen demasiada punta. Podemos llevarlo tanto con corbata, admitiendo este cualquier tipo de nudo, o sin ella. Como ves, es un tipo de cuello muy versátil, que además consigue estilizar el cuello ya que su altura es relativamente baja.
CUELLO INGLÉS
Como sabéis, la sastrería tiene su origen en Inglaterra, por lo que podríamos decir que el cuello inglés es el padre de todos los cuellos. También es cierto que en nuestro país su uso es más bien limitado, pero igualmente es importante conocerlo. Este cuello es muy formal y se caracteriza por tener las puntas muy largas. Para llevarlo, es imprescindible hacerlo con traje y corbata. El nudo de esta debe ser lo más estrecho posible debido al poco espacio que queda entre las palas. Es un cuello alto, ideal para los que necesiten disimular un cuello demasiado largo y estrecho.
CUELLO AMERICANO
Este tipo de cuello también tiene su origen en Inglaterra, concretamente en el deporte del polo, donde se decidió por abotonar las palas de los polos (valga la redundancia) para que estas no golpeasen la cara del jinete al cabalgar. Sin embargo, fue en Estados Unidos donde se popularizó esta solucion y se llevó fuera del mundo del deporte.
Este cuello está reservado para ocasiones más informales. Preferiblemente lo debemos llevar sin corbata, aunque dependiendo de la camisa podemos permitirnos su uso con traje y corbata. Este tipo de cuello es común verlo en camisas con estampados o de cuadros.
CUELLO MAO
El cuello mao tiene su origen en la China Imperial y es uno de los que va ganando más terreno en la actualidad. Se caracteriza por su acabado redondo, su poca altura y sobre todo por no tener palas. Es una opción perfecta para los meses más cálidos y las situaciones más informales.
Si queréis saber más sobre este tipo de cuello os invito a leer este post donde se analiza en profundidad este.
CUELLO OPERA
Como su nombre indica, este cuello está reservado para ocasiones muy especiales como eventos o ceremonias. Es un cuello muy abierto donde las palas son muy pequeñas. El objetivo es no restar ni un centímetro de protagonismo a la pajarita, la cual debemos llevar sí o sí.
Existen muchos más tipos de cuello pero la mayoría de estos son variaciones de estos cinco tipos principales. Memorízalos bien y no volverás a tener problemas al elegir o comprar una nueva camisa.