Llega el verano, pero todavía hay días que seguimos utilizando nuestras corbatas, ya sea por trabajo, por una cita especial, un evento, una boda, etc…
Hoy os proponemos una guía práctica para saber cuál es el nudo de corbata idóneo en cada ocasión y cuál es el mejor nudo para un día de verano muy caluroso.
Puede parecer algo simple pero se trata de todo un arte. Lo primero a tener en cuenta es qué tipo de corbata tenemos en nuestra mano, es decir, si se trata de una corbata gruesa o ligera. En el caso de que se trate de una corbata gruesa, deberemos optar por un nudo simple para no añadir volumen extra, por el contrario, si se trata de una corbata de un tejido más ligero, exigirá un nudo de mayor elaboración para que aporte el volumen que la corbata no tiene.
Tras esto, deberemos pasar a elegir el tipo de nudo que vamos a realizar, nosotros te vamos a hablar de los más conocidos:
– Nudo simple
Ideal para camisas de cuellos estrechos, para corbatas de tejidos gruesos y para personas de
constitución delgada.
– Nudo Windsor
Se trata del nudo más formal y elegante. Se lleva con cuellos de camisa muy separados. Es
perfecto para hacer con corbatas más ligeras.
– Nudo doble
Este nudo es el más apropiado para cuellos de camisa anchos. Tiene como objetivo que toda la
atención recaiga en la corbata. El tejido de ésta debe ser fino.
– Nudo diagonal o italiano
Éste es el ideal para días calurosos en verano. Se caracteriza por proyectar una estética más
desenfadada e informal. Su ejecución es sencilla y no agobiará a nuestros cuellos.
Como veis, es importantísimo seleccionar el nudo correcto para cada tipo de ocasión, ya que esto indicará nuestra menor o mayor elegancia en el arte del saber vestir. Además de combinar las corbatas y el nudo adecuado, es conveniente no olvidar que el largo de la corbata no puede exceder la hebilla del cinturón y bajo ningún concepto se ha de llevar un nudo flojo ya que esto daría como resultado una imagen de “dejadez”.