El verano es una estación complicada en la que las altas temperaturas condicionan mucho nuestro día a día. Alargamos las noches a pesar de que en verano son las más cortas. Buscamos la sombra como el perro del refrán. Incluso llegamos a defender que no hace falta comer para sobrevivir. Sólo necesitamos hidratarnos. Meses peculiares estos, en los que incluso nos encontramos algo desubicaos a la hora de vestir.
No saber que ponerte. El clasicismo y la formalidad del invierno se rompe de golpe y nos quedamos a medio camino entre el chiringuito y la piscina. El verano nos pide looks más informales y cómodos, y es en este punto donde las zapatillas se adueñan de nuestros pies y calles. Ideales para casi cualquier ocasión, las zapatillas se han ganado con derecho el apodo de ‘los nuevos zapatos’.
Las zapatillas hace algún tiempo que dejaron de considerarse un calzado exclusivo para hacer deporte. Es cierto que la mayoría están diseñadas para ello, pero el uso que se les damos es mucho más cotidiano. Existen muchos tipos de zapatillas y por supuesto hay una para cada ocasión. Si quieres saber algunas pistas sobre como llevarlas, continúa leyendo.
Para empezar, las zapatillas que merecen la pena llevar las podemos clasificar en tres tipos: futuristas, retro y coloridas (es una clasificación totalmente propia). Las fronteras entre unas y otras son difusas pero trataré de generalizar.
Las retro son mis preferidas. Si naciste antes de los 90 sabrás de lo que hablo. Estas zapatillas recuerdan a tu infancia y te permiten cumplir el sueño que de pequeño se te escapó. Suelen ser de colores muy planos, principalmente blancas y con algún detalle. Clásicas pero tremendamente actuales, son perfectas para cualquier ocasión. Las puedes llevar con vaqueros o con unos chinos en color camel combinando con un polo o camisa estampada. Si no sabes que color elegir elegir, apuesta por el blanco. Con el siempre acertarás.
Las de corte futurista también son de colores planos pero su diseño sorprende por su modernidad. Cámaras de aire, tejidos, texturas… Son las zapatillas más enfocadas a la práctica real del deporte. Para sacarlas a la calle, elige unos vaqueros estrechos con camiseta o camisa a cuadros. Su estilo tan tecnológico no admite con facilidad prendas más formales como el pantalón de vestir o el polo. Perfectas para planes con amigos o como compañeras de viaje. Tu pie pocas veces habrá estado mejor.
Por último están las zapatillas cuyos colores son muy llamativos. Están muy de moda pero realmente hay que tener mucho cuidado con ellas. En mi opinión, están reservadas para un público más adolescente o a estilos muy urbanos. Un Hombre NdA que se precie no debería nunca apostar por este estilo, a no ser que sea el típico cuñado, en cuyo caso se admite cualquier cosa ;).
Las reglas del juego estan cambiando. En unos pocos años hemos pasado de considerar a la zapatilla como un imposible a la hora de entrar a la discoteca de moda a combinarlas con trajes para darles un toque desenfadado y muy juvenil.
El único secreto es elegir la zapatilla adecuada y considerar el look como un todo. De esa forma tus zapatillas nunca desentonaran y tus pies lo agradecerán.